Cuando en la vida se unen las ganas de luchar y entrega de una persona en favor de un hijo discapacitado, pueden ocurrir escenas y actividades que no nos pueden dejar en la indiferencia, sino más bien valorar el esfuerzo y dedicación como ejemplo de superación y de una respuesta valiente y ejemplificante. La participación de padre y hijo en este triatlon rebosa de entusiasmo y amor infinito. No dejen de ver la cara de satisfacción y felicidad al final del vídeo, una vez conseguida la meta.
Hace tiempo que me lo enviaron por e-mail y, lo publique sin dudarlo en ningún momento en mi blog, me parecio una muestra de amor insuperable e inigualable, la verdad, todo un ejemplo a seguir. Saludos.
ResponderEliminarla verdad es que cuando se conocen este tipo de actuaciones, queienes nos dedicamos al mundo de la discapacidea, vemos cómo no hay nada imposible siempre que se conjugen voluntad, esfuerzo y ganas de vivir. Nada es imposible, si así lo deseamos, aunque para ello necesitemos ayuda. Si el otro está de acuerdo, pues adelante. Gracias Abel por tu comentario.
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